
Cuando empiezas a invertir, una de las preguntas más difíciles de responder es: ¿cuánto riesgo debo asumir? Es normal tener dudas, sobre todo cuando empiezas a escuchar cosas como cripto, acciones emergentes, startups o cualquier otro activo con mucha volatilidad. Justamente ahí entra en juego la llamada regla del 5%, una guía sencilla pero poderosa para mantener el control de tus emociones… y de tu cartera.
En este artículo te explico qué es la regla del 5%, cómo aplicarla, qué sentido tiene, y por qué puede ayudarte a dormir más tranquilo mientras haces crecer tu dinero.
¿Qué es la regla del 5%?
La regla del 5% consiste en no destinar más del 5% de tu patrimonio total (o, si lo prefieres, de tu cartera de inversión) a activos considerados altamente arriesgados o especulativos.
Es una forma de poner límites. No significa que no puedas asumir riesgos, sino que lo hagas de forma controlada. Así, si algo sale mal porque puede salir mal no comprometes el resto de tu futuro financiero.
¿Qué activos se consideran “más arriesgados”?
La lista puede variar según el contexto, pero normalmente se incluyen:
- Criptomonedas como Bitcoin, Ethereum, etc.
- Acciones individuales de empresas muy volátiles (por ejemplo, tecnológicas sin beneficios, startups recién salidas a bolsa…).
- Crowdfunding inmobiliario o empresarial.
- ETFs apalancados o inversos.
- Opciones financieras o futuros.
- Inversiones en países emergentes con inestabilidad política o económica.
- Cualquier activo que no entiendas bien o que te promete “rentabilidades espectaculares”.
No es que todos sean malos, pero sí tienen un riesgo superior a la media. Y ese riesgo debe gestionarse.
¿Por qué usar esta regla?
La razón es psicológica, matemática y estratégica.
- Psicológica: evita que tomes decisiones por impulso. Si sabes que tienes un 5% en criptos, no vas a entrar en pánico si bajan un 50%. No te va la vida (ni tu jubilación) en ello.
- Matemática: una pérdida del 100% de ese 5% no destruye tu cartera. Si tienes 10.000 €, perderías como mucho 500 €. Molesto, pero asumible.
- Estratégica: te permite explorar, aprender y experimentar sin necesidad de hipotecar tu futuro financiero.
Es una forma de combinar prudencia con ambición. De dejar espacio al “y si esto funciona” sin arriesgar tu estabilidad económica.

¿Cómo aplicarla?
Veamos un ejemplo práctico.
Supón que tienes:
- 20.000 € invertidos en total: 15.000 en fondos indexados, 4.000 en un fondo monetario y 1.000 en criptomonedas.
Esas criptomonedas ya representan un 5%. Si decides comprar más, estarías rompiendo la regla. ¿Puedes hacerlo? Claro. Pero debes ser consciente de que estás asumiendo más riesgo del recomendado.
Otra opción es definir ese 5% sobre tu patrimonio total. Es decir, si además de los 20.000 invertidos tienes 10.000 € en una cuenta de ahorro, entonces tu patrimonio total son 30.000 €, y el 5% serían 1.500 €. En ese caso, podrías ampliar un poco más tu exposición a activos especulativos sin sobrepasar el límite.
¿Y si tengo 500 € en total? ¿También aplica?
Buena pregunta. La regla del 5% es más útil cuando ya tienes una base de inversión estable. Si estás empezando con cantidades pequeñas, no pasa nada si ese porcentaje es algo mayor al principio.
La clave está en la proporción y en la intención. Si tienes 500 €, quizá meter 50 € en algo arriesgado no es tan grave. Pero si tus únicas inversiones son esos 500 €, y los metes todos en criptomonedas sin entenderlas bien, eso no es una estrategia: es una ruleta.
Empieza con poco. Aprende. Y a medida que crezcas, estructura mejor tu cartera con reglas como esta.
¿La regla es rígida?
No. Como todo en finanzas personales, depende de tu perfil de riesgo, tus objetivos y tu experiencia.
Hay personas que están cómodas con un 10% en activos arriesgados. Otras, directamente lo evitan. Lo importante no es el número exacto, sino la lógica detrás: poner límites a la parte más especulativa de tu inversión.
Piensa en ello como una zona controlada para experimentar. Como una pequeña habitación ignífuga dentro de tu casa: puedes jugar ahí, pero si algo se quema, no se lleva todo por delante.
¿Qué pasa si el 5% crece mucho?
Imagina que tus criptomonedas valen ahora el 5% de tu cartera, pero de repente se multiplican por dos. Ahora pesan un 10%. ¿Qué haces?
En ese caso, puedes:
- Vender una parte para volver al 5%.
- Mantenerlo si te sientes cómodo, pero sabiendo que estás fuera de tu zona de seguridad.
- Rebalancear la cartera completa (vender en parte otros activos para compensar).
Lo importante es no dejar que una inversión se convierta en el centro de tu estrategia si no lo planeaste así. Ni dejarte llevar por la euforia sin revisar tus límites.
Lo que no debes hacer
- Apostarlo todo a un solo activo porque ahora es el momento.
- Caer en el FOMO (miedo a quedarse fuera) y duplicar tu inversión arriesgada sin revisar tu plan.
- Ignorar tu tolerancia al riesgo. Si no duermes por las noches, estás mal invertido, por mucho que el activo tenga potencial.
- Pensar que esta regla es para cobardes. Al contrario: es una muestra de disciplina y visión a largo plazo.
Conclusión
La regla del 5% es una herramienta sencilla para protegerte de ti mismo. Te permite participar en inversiones más arriesgadas sin poner en peligro tu estabilidad financiera. No busca frenar tu crecimiento, sino hacerlo sostenible.
Porque sí, hay quien se ha hecho rico con criptos, acciones locas o inversiones alternativas. Pero también hay miles que lo han perdido todo por no tener límites. No se trata de suerte, sino de estrategia.
Así que, si quieres probar cosas nuevas, hazlo. Pero con cabeza. Y con un 5% como escudo frente a tus propios impulsos. A largo plazo, eso vale más que cualquier rentabilidad puntual.
Si esto te ha servido consulta los próximos artículos que seguiremos añadiendo en esta web para que aprendas a invertir puedas cambiar tu vida